En los oasis de Egipto, calurosos y con pocas precipitaciones, se cultiva desde hace ya siglos el aceite de neguilla con fines curativos.
El aceite de neguilla puede encontrarse en casi todos los botiquines de las viviendas del mundo árabe. Los componentes del aceite de neguilla son en parte similares a los de la onagra o a los del aceite de borraja. La neguilla tiene unas propiedades mucho más amplias. El componente principal de la neguilla es el aceite etéreo Nigelon Semohiprepinon que ha demostrado ser especialmente apropiado para reforzar el sistema inmunológico en casos de debilidad de los mecanismos de defensa.
Los campos de aplicación principal del aceite de neguilla son: la tendencia a alergias al polen y las alergias epidérmicas y para reforzar el sistema digestivo y bronquial.
El aceite de neguilla original de Egipto, prensado en frío, es un producto puramente natural para prevenir, reforzar, que actúa en casos de debilidad del sistema de defensas.